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Es un pequeño pueblo que pertenece al municipio de Pont de Suert, en la Alta Ribagorza,
Esta situado a 1195 metros de altitud, en un bello y tranquilo emplazamiento, entre el barranco de Raons y el barranco de l´Oratori.
Se accede a la localidad por una pista estrecha pero asfaltada que enlaza la localidad de Pont de Suert con la de Caldes de Boí.
La iglesia parroquial está dedicada a Santa Cecilia. Pertenece al obispado de Lérida porque en la Edad Media perteneció al obispado de Roda de Isabena. Forma parte de la unidad pastoral 25 del arciprestazgo de la Ribagorza y la rige el rector de Pont de Suert.
La iglesia es una pequeña construcción pero no exenta de campanario. Anteriormente a este sencillo templo estuvo la iglesia de Sant Miguel que se menciona en un inventario del siglo XII. La población de Gotarta perteneció a la familia Erill, que la terminaron donando al monasterio de Lavaix.
La localidad tuvo su propio ayuntamiento a partir de la promulgación de la constitución de Cadiz, y lo mantuvo hasta 1847 cuando se vio obligado a unirse al ayuntamiento de Llesp al no llegar a los 30 vecinos que exigía la nueva ley municipal aprobada dos años antes.
De su fisionomía arquitectónica destacan los suelos empedrados y las calles bajo bóvedas entre construcciones rusticas pirenaicas, dando al visitante la impresión de encontrarse en una localidad en la que se ha parado el tiempo.
Solo contaba con una población de 6 habitantes en el año 2006.
