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San Pedro de Rocas es el Monasterio más antiguo de España, un sitio enigmático y fascinante, es un antiguo Monasterio e Iglesia de culto católico que a día de hoy está en desuso. Se encuentra ubicado en un paraje de gran belleza fundado en el siglo VI, por los datos que aportan una lápida encontrada en la Iglesia del Monasterio que hoy se conserva en el Museo Arqueológico de Orense.
Hasta la llegada al monasterio tenemos que atravesar un bosque espeso y sombrío que da la sensación de trasladarse en el tiempo. En medio nos encontramos con una construcción de granito, una casa prioral del siglo XVII que ha sido rehabilitada como centro de interpretación de toda la Ribeira Sacra. En la parte de atrás está la espadaña del campanario que se encuentra construida sobre una roca a la que se accede por una escalinata tallada en la piedra.
Este original Monasterio tiene sus capillas excavadas en la roca y como cabecera de una Iglesia Medieval, está bastante apartado del río y se encuentra ubicado en la parroquia de las Rocas de la localidad orensana de Esgos.
En su conjunto está considerado desde 1923 como un Bien de Interés Cultural dentro del Patrimonio Histórico de España.
El origen del monasterio, de la Ribeira Sacra, es eremítico de comienzos del cristianismo como casi todos los monasterios de esta zona. Tiene hermosos elementos románicos y góticos, muy sencillos y naturales siendo un antiquísimo cenobio excavado en la roca por los propios eremitas, siete ascetas que se retiran aquí para dedicarse a la oración.
A principios del siglo VIII por los ataques de los musulmanes es abandonado, y cuenta la leyenda que fue encontrado un siglo más tarde en ruinas por un caballero durante una cacería y se retira aquí como eremita siendo nombrado abad un poco más tarde.
Este Monasterio ha sufrido varios incendios uno ocurrido en el siglo XI que lo destruye en gran parte, siendo reconstruido con ayuda del abad Aloito y la comunidad de Celanova y otro ocurrido en 1640. Después de este último, se reconstruye de nuevo dejándolo como se ve actualmente. A principios del siglo XX sufre otro de nuevo que motiva su abandono siendo después casa rectoral.
La iglesia, data del siglo XII, tiene tres naves comunicadas por arcos decorados por pilares adosados y capiteles labrados en la misma roca. El suelo está tallado con sepulcros antropomorfos de diferentes tamaños. La nave central es más ancha y larga que las laterales. En el techo hay un respiradero por donde entra luz y aire, como si fuera una falsa cúpula con linterna y parece que tiene bóvedas de medio cañón. En ella se conserva el altar y a su lado una reproducción de un Cristo románico. Se sabe que la capilla de la derecha estaba dedicada a San Antonio Abad.
Tras la Iglesia hay una fuente que recoge aguas sobre la ladera por una formación natural. Las aguas de la fuente llamada de San Bieito dicen que tienen la propiedad de curar las verrugas, hay que meter la zona afectada y rezar un padrenuestro.
La iglesia de este monasterio junto con otras nueve iglesias más, forma parte de la llamada ruta de las "iglesias luciérnagas" Un programa que va a permitir visitarlas tanto de día y de noche, unas estarán iluminadas y otras contarán con sonido y paneles explicativos.